The Legal Impacts of COVID-19 in the Travel, Tourism and Hospitality Industry
26 Ahora bien, es preciso señalar aquí que estas actividades, a día de hoy, no tienen la suficiente entidad para evitar que aquellos otros negocios no se beneficien, también, del viajero que trata de economizar en parte sus gastos en transporte y alojamiento, que son los más elevados cuando organizamos un viaje o vacación. Entre estas nuevas modalidades, encontramos, de un lado, las plataformas de car sharing , algunas de ellas utilizadas por empresas del sector del alquiler de vehículos sin conductor 50 . Estas plataformas prestan un servicio similar a las empresas de alquiler de vehículos sin conductor, si bien se diferencian de estas por dos factores primordiales: (i) porque muchas facilitan o ceden los vehículos por fracción de tiempo (minutos y horas) en vez de por días y (ii) porque tales vehículos suelen cederse y utilizarse dentro de un mismo municipio 51 , aunque nada impide que se utilicen para viajes interurbanos. Por medio de estas plataformas, aquellas personas que necesitan un vehículo para ocasiones concretas se lo alquilan a otras durante el tiempo que la misma no los utiliza. Así, la relación que se produce es entre iguales, y por un tiempo y coste sensiblemente menores que los que podrían obtenerse a través de cualquier empresa de alquiler de vehículos 52 . Cierto es que apenas le hacen competencia a estas últimas, entre otras razones porque aún están en pleno desarrollo y porque no son tantos los viajeros que conocen las ventajas de visitar un lugar, viajando en transporte público y acudiendo a este sistema de alquiler, solo en las ocasiones en las que verdaderamente requiere de un automóvil. A ello se une que siempre estará en disposición de solicitar un servicio de transporte a través de las consabidas plataformas de alquiler de un vehículo con conductor (como Uber) o compartiendo viaje con otros pasajeros través de plataformas como BlaBlaCar 53 . Las plataformas de car sharing han ido ampliando su oferta, hasta el punto de que, actualmente, pueden demandarse, a través de ellas, todo el tipo de medios de transporte, desde el clásico coche, pasando por motocicletas, caravanas, cubriendo así 50 Es el caso de Avancar, que ha sido adquirida primero por Zipcar y, posteriormente, por AVIS. 51 ARMENGOL I GASULL, O. y OLMOS CASTRO, N., “El impacto de la economía colaborativa en el transporte interurbano: un análisis jurídico del Ride Sharing ”, en La regulación de la economía colaborativa , Juan José Montero Pascual (Dir.), Tirant lo blanch, Valencia, 2017, p. 329. 52 Destacan plataformas como Avacar, BluMove, Easycar o Car2go, entre otras. 53 GONZÁLEZ CABRERA, I., “El turismo colaborativo: Las múltiples actividades puestas al servicio del turismo y la dificultad de su encaje jurídico único”, ob. cit., p. 56.
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NzgyNzEy