The Legal Impacts of COVID-19 in the Travel, Tourism and Hospitality Industry

2 sus casas. Destacaremos también otros sectores, como del transporte y de las actividades complementarias, que podrían ser un revulsivo cuando pase la crisis del COVID-19. Se trata de contribuir a relanzar el sector turístico en sí mismo, como un sector integrado y no sujeto, exclusivamente, al estándar profesional del alojamiento o de las grandes compañías de transporte, sino que, juntamente con estos, pueda ayudar a potenciar la actividad turística como un todo integrado, en un momento en el que es muy probable que buena parte de las familias puedan verse afectadas por el cierre temporal de empresas y por la paralización de la actividad económica general. Es evidente que, en una situación de crisis económica, más allá de la crisis sanitaria y sus coletazos 3 , las familias deben hacer frente a las necesidades más inmediatas para su supervivencia. Solo en un segundo momento se puede plantear la eventualidad de gastos más superfluos, entre los que encontramos el disfrute de unos días de ocio o de vacaciones. Ciertamente, aquellos trabajadores que no hayan visto mermar sus ingresos podrán continuar sus vidas con cierta normalidad cuando el confinamiento acabe y se permita la libre circulación de personas, dentro y fuera de nuestras fronteras. Quienes sí hayan visto afectada su economía y deseen la vía de escape que anímicamente conllevan unos días de vacaciones, habrán de afrontarla con recursos evidentemente más asequibles, lo que conlleva una búsqueda de ofertas en el sector profesional, si este está en disposición de hacerlas, o la alternativa de la llamada economía colaborativa como medio más inmediato para lograr unas vacaciones menos costosas. De hecho, el Círculo Turístico de Canarias, una asociación que representa a determinados sectores que dependen de forma directa o indirecta al turismo (vivienda vacacional, inmobiliario, ocio, comercio, restauración, salud, transporte y la construcción), en una nota difundida a través de sus redes sociales el lunes 6 de abril, señala que la crisis del COVID-19 ha puesto de manifiesto la debilidad del sector turístico, fundamentalmente en Canarias, una de las zonas turísticas españolas por excelencia. Entienden que parte de la debilidad está en la dependencia de las “empresas foráneas, OTA´s, touroperadores, 3 Ciertamente, a estas alturas no es posible aventurar hasta cuándo tendremos que luchar contra el virus y qué recursos habrá que poner a disposición de la población y de nuestros visitantes una vez que pase este primer gran brote epidémico.