Derecho del Turismo en las Américas

Marco Jurídico del Turismo Accesible. Turismo para Todos 175 equitativo de las personas con discapacidad o movilidad reducida. La infor‑ mación se debe facilitar en formatos visual y sonoro; Sobre estaciones terminales de pasajeros e infraestructuras afines : los pasajeros con discapaci‑ dad deberían tener fácil acceso a todos los servicios de transporte hacia y desde todas las terminales, estaciones u otras instalaciones afines a los mis‑ mos; siempre que sea posible, las terminales deberán estar situadas a un mismo nivel o equipadas con rampas donde exista un cambio de planta. Cuando sea necesario, deberán preverse rampas de acceso, ascensores o plataformas elevadoras. Además, Las personas en silla de ruedas que tengan que trasladarse a sillas especiales de embarque (por ejemplo, para embarcar en la cabina del avión) deberían poder hacerlo lo más cerca posible del medio de transporte, y las sillas de ruedas deberían ser manipuladas, alma‑ cenadas y trasladadas de modo que se puedan devolver intactas de manera inmediata a la llegada al destino o punto de tránsito; y Sobre carreteras prin‑ cipales : en estas carreteras, particularmente en las autovías de peaje, debería haber zonas de descanso a intervalos regulares, equipados con instalaciones y servicios, así como con aseos y teléfonos de emergencia, accesibles para todo el mundo y, en particular, para los viajeros con discapacidad. c) En las edificaciones también nos podemos encontrar con muchas barreras: por ejemplo, si existe una única entrada en un hotel y esta tiene escaleras, el acceso con maletas será difícil, y para usuarios de sillas de ruedas será imposible o peligroso. La anchura de pasillos y puertas son esenciales para que puedan maniobrar algunas personas con discapacidad; también es importante que los armarios, mostradores, mesas de restaurantes y cafete‑ rías tengan la altura adecuada. Merecen especial atención algunas propuestas de la OMT 34 : i. En materia de comunicación dentro del edificio, se debe facilitar la utilización de la lengua de signos, el braille y los formatos aumenta‑ tivos y alternativos. Los teléfonos y otros sistemas de comunicación públicos (Internet, fax) estarán diseñados y dispuestos para el uso del público, de forma que puedan ser utilizados por todos, indepen‑ dientemente de su estatura, de sus problemas de movilidad o de sus problemas sensoriales; ii. Los mostradores de información, facturación y venta de billetes debe‑ rían estar claramente indicados y con una zona accesible, reservada 34 OMT (2013). Recomendaciones de la OMT …, op . cit ., pp. 7 y 8.