Derecho del Turismo en las Américas

474 DERECHO DEL TURISMO EN LAS AMÉRICAS de a) catalogación de los recursos, b) evaluación del potencial turístico, c) crea‑ ción de condiciones apropiadas de infraestructura turística y servicios inherentes a la oferta turística, d) regulación de la operación turística, a través del desarrollo de un sistema de registro de prestadores de servicios turísticos, e) creación de incentivos para el fomento, promoción, y difusión del “Destino Bolivia”, f ) sen‑ sibilización turística en todos los sectores relacionados con esta actividad, y g) elaboración e implementación de acuerdos estratégicos nacionales e interna‑ cionales, en materia turística para promover y difundir el “Destino Bolivia”. Estas políticas deberán establecerse en el Plan Nacional de Turismo, que estará sujeto a modificaciones periódicas según la dinámica turística que se pre‑ sente en el Estado y las entidades territoriales autónomas. Entre los recursos turísticos que se espera desarrollar todavía, se considera el turismo en áreas protegidas, que requiere, además de la autorización de la Autoridad Competente, la autorización de la instancia competente en materia de áreas protegidas, en el marco de la normativa sectorial establecida, para el efecto en este caso la Ley de Áreas Protegidas, la Ley Nº 1333 y la Ley de la Madre Tierra. 8. NORMAS MIGRATORIAS No podemos soslayar, en este análisis, la normativa migratoria para el turismo receptivo hacia Bolivia. Por orden constitucional y convencionalidad de acuerdo con la primacía legislativa establecida en el Artículo 410 de la Constitución Política del Estado Plurinacional, la normativa migratoria está relacionada con derechos de ciudadanía, soberanía, y tránsito y tráfico de personas. Como explicáramos línea arriba, dentro el régimen de protección constitu‑ cional al turismo, la migración y turismo receptivo, de acuerdo con los convenios sectoriales y bilaterales, impone requisitos al visitante que, en todo caso, están relacionados con los principios generales de autodeterminación, soberanía, y noinjerencia de los Estados, debiendo considerarse también la Carta Democrática de la OEA, las resoluciones emitidas por la Organización Mundial de Turismo, los Tratados de Comercio Exterior, y, mundanalmente, las circunstancias histó‑ ricas que podrían poner en riesgo la seguridad interna de los Estados. Bolivia no está aislada de estos contextos aunque, en los últimos 14 años de vigencia del “proceso de cambio” la ideología el socialismo del siglo XXI, implan‑ tada por los países coyunturalmente de izquierda, haya generado una especie de