Derecho del Turismo en las Américas

Transversalidad y Realidad del Derecho Público del Turismo 89 venciones públicas que afectan tanto a la seguridad como a requisitos medioambientales o cuestiones estéticas. Finalmente, debe mencionarse el hecho de que los cambios culturales tienen un reflejo importante en la transformación del contenido del capital simbólico de un producto turístico, parte fundamental de su capacidad de atracción. Hasta ahora ese capital era más inmutable. Hoy, sin olvidarse de la importancia de la herencia en el mismo, nuevos factores, como la mencionada apreciación genera‑ lizada de la calidad, lo hacen evolucionar y, con él, transformar la relación entre la oferta y la demanda. Así, no puede ignorarse la importancia que el capital humano tiene para el desarrollo de una oferta turística adecuada. Y, precisa‑ mente, no ha sido éste un plano bien atendido, como de forma elocuente demuestra la penuria, en general, en la que se desenvuelven los estudios turísticos. En todo caso, debe quedar claro que la emergencia de un nuevo modelo no supondrá el fin del turismo desarrollista. La dimensión económica del turismo, su importancia para la economía y, fundamentalmente, para el desarrollo de países y territorios con carencias de otros recursos, permanecerá siempre. La cuestión estribará en conseguir conciliar su eficacia como instrumento de desa‑ rrollo económico con las nuevas necesidades y exigencias derivadas de los nuevos paradigmas sociales y culturales. D. La incidencia del cambio tecnológico en la política turística Resulta superfluo referirse al impacto que la consolidación del desarrollo tecno‑ lógico ha tenido en todas las actividades humanas. El turismo no podía ser una excepción. De esta forma, puede aventurarse que el turismo, las diferentes polí‑ ticas turísticas que hayan de desarrollarse en los próximos años, deberán formularse tomando en consideración los cambios introducidos por la consoli‑ dación de un nuevo paisaje tecnológico. Algunos de ellos repercutirán directamente en productos, servicios e instrumentos turísticos. Otros serán cam‑ bios sucedidos en el entorno pero con neta influencia para el sector. En cualquier caso, una variable diferente y de importancia creciente se ofrece a los ojos del gestor y del estudioso. Muchas de las alteraciones producidas por el impacto tecnológico resultan bien conocidas y han comenzado a ser estudiadas tanto desde perspectivas eco‑ nómicas, como jurídicas o de gestión. Otras, sin embargo, lo son menos, bien por encontrarse en fase embrionaria, bien por su menor visibilidad. En todo caso, resulta preciso llamar la atención sobre la obligación de estar atentos a un

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